ME PREGUNTARON SI SEGUÍA SIENDO DE BOCA: Dejame ser de BOCA, nomás, les dije.
Los escritorios son fríos, como uds., el silencio atroz no fue un hecho aislado se dio en un contexto de amargura infinita que les garúa desde el 66 más ó menos, no llenan el estadio, pero van y lo prenden fuego, le pegan a los jugadores, se hacen los muertitos para clasificar sin jugar 45 min., tiran piedras, pierden la categoría, después venden su alma ó el ogt a la conmebol para recuperarla.
Gracias, che.
Dejame de BOCA, nomás.
La Paternidad xeneize, sigue vigente y seguimos 0 Descensos.
Esa mancha, no se les borra nunca más.
Háganse cargo.