Libertario de cartón,
sueña ser un tiranuelo
de país bananero,
déspota e inútil,
va a durar lo que un corso
pero mientras tanto
nos va a hundir,
endeudar y reprimir
por demás,
buscando que nunca más
nos podamos levantar
para devolverle la gentileza
a su decadente majestad
y a su Republiqueta Bananera
